Para mí, el éxito empresarial es poder dedicarte a lo que más te gusta, sin renunciar a tener tiempo para disfrutar de tu familia, amigos y ocio personal. Es ayudar a crecer a las personas de tu organización, y despertarte cada día sintiéndote querido y respetado. Es compartir los logros cuando las cosas van bien y saber que tu equipo te apoyará cuando lo necesites.

VISIÓN

Siempre trato de enfocar las situaciones desde diferentes perspectivas y ponerme en el lugar de los demás para tomar las decisiones adecuadas, siendo muy consciente de que no hay líder sin equipo, ni equipo sin líder.

HONRADEZ

Estoy convencido de que el Universo se le queda pequeño a cualquier ser humano que tenga la necesidad de “esconderse” por haber actuado malintencionadamente. Mi abuelo siempre me ha dicho que, haga lo que haga, debo obrar con honradez, y se ha convertido en un mantra para mí. Con el paso de los años, te das cuenta de que no existe mejor garantía para los demás.

 

FORTUNA

Podría decirse que soy una persona afortunada, pero más bien por el entorno y la familia que me ha tocado. Soy de los que piensa que un puñado de “buena o mala suerte” no puede escribir tu destino. Constancia, disciplina y sacrificio deben ser los encargados de abrirte paso hacia tus objetivos.

Saber estar en el momento adecuado es muy importante, pero no lo es menos preparar ese momento con la fe de que un día el destino te brindará una oportunidad.

APRENDIZAJE DE LOS ERRORES

Pienso que una de las virtudes que más nos diferencia a las personas es la capacidad para afrontar o asumir los errores. Según tu actitud, de un mismo error puedes sacar aprendizaje, experiencia y sabiduría, o frustración, miedo y bajeza. Buena parte de mi evolución se la debo a los errores del pasado, y tengo muy presente que debo seguir aprendiendo de ellos.